EL OCTAVO REY: EL HIJO DE PERDICIÓN

“La bestia que era, y no es, es también el octavo; y es de entre los siete, y va a la perdición.” (Apocalipsis 17:11) 

En el pasado artículo pudimos ver el origen y desarrollo del sistema globalizado de gobierno que dominará al mundo en los días de la tribulación. Podemos notar que del séptimo imperio o imperio romano revivido surgirá un octavo en la persona del anticristo. Este será producto de los siete anteriores, arrastrando lo peor de cada uno y aumentando su maldad.

Las escrituras proféticas ofrecen detalles importantes sobre el carácter y obra de este inicuo, cuyo surgimiento será por obra de Satanás, incluso manifestará milagros y prodigios engañosos para llevar a la perdición a los que rechazan la verdad divina,

“... inicuo cuyo advenimiento es por obra de Satanás, con gran poder y señales y prodigios mentirosos, y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos.” (2 Tesalonicenses 2:9,10)

También se le llama el hombre de pecado o hijo de perdición, sin embargo al presente no puede manifestarse, ya que el Espíritu Santo y su labor a través de la Iglesia, no le permite hacerlo,

“Porque ya está en acción el misterio de la iniquidad; sólo que hay quien al presente lo detiene, hasta que él a su vez sea quitado de en medio. Y entonces se manifestará aquel inicuo, a quien el Señor matará con el espíritu de su boca, y destruirá con el resplandor de su venida… (2 Tesalonicenses 2:7,8)

Recordemos que esta dispensación se conoce como “el año de la buena voluntad de Jehová” o “año agradable del Señor”. El término año significa época y abarca desde el nacimiento de Jesús hasta el arrebatamiento de su Iglesia a las esferas celestiales,

“El Espíritu del Señor está sobre mí, Por cuanto me ha ungido“ para dar buenas nuevas a los pobres; me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; a pregonar libertad a los cautivos, y vista a los ciegos; a poner en libertad a los oprimidos; a predicar el año agradable del Señor.” (Lucas 4:18,19)

Una vez que la Iglesia sea levantada comenzará “el día del Señor” donde Dios ajustará cuentas para llevar a su creación a una restauración total,

“Pero el día del Señor vendrá como ladrón en la noche; en el cual los cielos pasarán con grande estruendo, y los elementos ardiendo serán deshechos, y la tierra y las obras que en ella hay serán quemadas...” (2 Pedro‬ ‭3:10)

Se ubica el origen del anticristo en Dinamarca, actuales descendientes de Dan, la antigua tribu apóstata de Israel. Cuando Jacob el patriarca profetizó sobre sus doce hijos antes de su muerte, pudo ver algo muy nefasto en el futuro de este hijo; esa revelación lo atemorizó grandemente, a la vez que pudo discernir que sería el tiempo de la salvación de Dios, 

“Dan juzgará a su pueblo, como una de las tribus de Israel. Será Dan serpiente junto al camino, víbora junto a la senda, que muerde los talones del caballo, y hace caer hacia atrás al jinete. Tu salvación esperé, oh Jehová.” (Génesis 49:16-18) 

Su levantamiento al trono del mundo está siendo preparado desde hace muchos siglos. En el final de los tiempos surgirá como un cuerno pequeño o poder político de poca importancia, pero ganará arraigo rápidamente por sus ideas novedosas y capacidad de persuasión. Sus ideas irán dirigidas a cambiar la mentalidad misma de los pueblos, destruyendo la fe en Dios y eliminando a todos los que profesen creer en El, 

“... hablará palabras contra el Altísimo, y a los santos del Altísimo quebrantará, y pensará en cambiar los tiempos y la ley…” (Daniel 7:25) 

En las profecías de Daniel se describe a este  individuo como de carácter voluntarioso, arrogante, avaro, ambicioso, irrespetuoso y profano, 

“Y el rey hará su voluntad, y se ensoberbecerá, y se engrandecerá sobre todo dios; y contra el Dios de los dioses hablará maravillas, y prosperará, hasta que sea consumada la ira; porque lo determinado se cumplirá. 

Se desligará de toda creencia en el Dios de sus antepasados, hasta el punto de caer en una mente reprobada, convirtiéndose en un acérrimo enemigo del Señor y su obra. Desechará el afecto natural de hombre-mujer y se volverá a la homosexualidad. Por esto no debe extrañarnos, la intensa propaganda de los medios y los gobiernos por homosexualizar al mundo. El Nuevo Orden Mundial está preparando la plataforma para la llegada de este individuo,  

“Del Dios de sus padres no hará caso, ni del amor de las mujeres; ni respetará a dios alguno, porque sobre todo se engrandecerá.”  (Daniel 11:37) 

Concertará un pacto con Satanás (un dios ajeno) y será lleno del poder infernal. Subyugará a la humanidad impenitente y se hará de una fortuna terrenal incalculable,

Mas honrará en su lugar al dios de las fortalezas, dios que sus padres no conocieron; lo honrará con oro y plata, con piedras preciosas y con cosas de gran precio. Con un dios ajeno se hará de las fortalezas más inexpugnables, y colmará de honores a los que le reconozcan, y por precio repartirá la tierra.” (Daniel 11:38,39) 

Las escrituras señalan ese tiempo como la época donde la maldad habrá llegado a su máxima expresión. Habrá el ambiente perfecto para que el hijo de perdición pueda manifestarse. Se le describe como arrogante e insolente, pero muy sagaz y elocuente. En este pasaje se reitera que su poder no será de procedencia humana. Perseguirá al pueblo de los santos (Israel) y provocará el sufrimiento más grande en la historia de la nación, el tiempo de la angustia de Jacob,

“...cuando los transgresores lleguen al colmo, se levantará un rey altivo de rostro y entendido en enigmas. Y su poder se fortalecerá, mas no con fuerza propia; y causará grandes ruinas, y prosperará, y hará arbitrariamente, y  con él destruirá a los fuertes y al pueblo de los santos. Con su sagacidad hará prosperar el engaño en su mano...” (Daniel 8:23-25)

Se hace referencia al rompimiento del pacto a la mitad del período. Recordemos que la primera gestión que hará el anticristo cuando sea levantada la Iglesia será un falso pacto con Israel. Esto se hará en conspiración con las demás naciones, con el propósito de obtener el desarme militar del pueblo judío y realizar un sorpresivo ataque con una gigantesca coalición de países liderados por Rusia. Dios intervendrá directamente y frustrará el ataque. Luego, ante el fracaso de esa invasión, el anticristo se llenará de ira e invadirá con sus tropas a la nación de Israel, causando gran estrago. En su locura final intentará pelear contra el Señor cuando lo vea regresar sobre las nubes, pero será destruido,      

“... sin aviso destruirá a muchos; y se levantará contra el Príncipe de los príncipes, pero será quebrantado, aunque no por mano humana.” (Daniel 8:23-25) 

“Y por otra semana confirmará el pacto con muchos; a la mitad de la semana hará cesar el sacrificio y la ofrenda. Después con la muchedumbre de las abominaciones vendrá el desolador, hasta que venga la consumación, y lo que está determinado se derrame sobre el desolador.” (‭‭Daniel‬ ‭9:27‬ )

El término semana (shabua o semana de años) se refiere a los últimos siete años de la época presente. Será la época posterior al arrebatamiento, conocida como el período de la tribulación,

CONTINUARÁ …