“Y los diez cuernos que has visto, son diez reyes, que aún no han recibido reino; pero por una hora recibirán autoridad como reyes juntamente con la bestia.” (Apocalipsis 17:12)
En todas las referencias que se hace sobre el gobierno del anticristo se encuentra adherida la figura de los diez cuernos. Es algo inseparable, ya que será lo que impulse su gobierno a través de la economía y la marca de control poblacional.
En las profecías de Daniel se nos habla del sueño de la gran imagen que tuvo el Rey Nabucodonosor. Aquí se describe una figura humana de gran tamaño, la cual simboliza los imperios de importancia escatológica que pasarían por la historia de la humanidad, a partir del imperio dominante en aquel tiempo (Babilonia). Es muy significativo que conforme se acerca el final de los tiempos del gobierno humano, se ve la representación de los diez cuernos en la figura de los diez dedos. Será un reino o gobierno que unirá a los países del mundo por medio de alianzas humanas, aunque no habrá total consenso entre ellos. Será un acuerdo por conveniencia, ante la crisis global que inevitablemente les afectará,
“Y lo que viste de los pies y los dedos, en parte de barro cocido de alfarero y en parte de hierro, será un reino dividido; mas habrá en él algo de la fuerza del hierro, así como viste hierro mezclado con barro cocido. Y por ser los dedos de los pies en parte de hierro y en parte de barro cocido, el reino será en parte fuerte, y en parte frágil. Así como viste el hierro mezclado con barro, se mezclarán por medio de alianzas humanas; pero no se unirán el uno con el otro, como el hierro no se mezcla con el barro.” (Daniel 2:41-43)
Serán diez bloques de naciones o sectores comerciales que cederán su autonomía (Federación) para unirse a un sistema comercial globalizado,
“Y los diez cuernos significan que de aquel reino se levantarán diez reyes; y tras ellos se levantará otro, el cual será diferente de los primeros, y a tres reyes derribará.” (Daniel 7:24)
Recibirán autoridad para reinar por una hora profética, que corresponde a la segunda mitad del período de siete años de la tribulación o tres años y medio,
“Y los diez cuernos que has visto, son diez reyes, que aún no han recibido reino; pero por una hora recibirán autoridad como reyes juntamente con la bestia.” (Apocalipsis 17:12)
También se les puede ver simbolizados en la visión de la cuarta bestia que vió el profeta Daniel, añadiendo la figura del hierro que alude a la maquinaria tecnológica y sofisticada que la acompañará,
“Después de esto miraba yo en las visiones de la noche, y he aquí la cuarta bestia, espantosa y terrible y en gran manera fuerte, la cual tenía unos dientes grandes de hierro; devoraba y desmenuzaba, y las sobras hollaba con sus pies, y era muy diferente de todas las bestias que vi antes de ella, y tenía diez cuernos.” (Daniel 7:7)
En el pasaje de Apocalipsis 13 podemos notar que surgirá en medio del ambiente turbulento de las naciones de la tierra,
“Me paré sobre la arena del mar, y vi subir del mar una bestia que tenía siete cabezas y diez cuernos; y en sus cuernos diez diademas; y sobre sus cabezas, un nombre blasfemo.” (Apocalipsis 13:1)
En el capítulo 17 de Apocalipsis se puede ver la mano siniestra detrás del sistema, la planificadora del Nuevo Orden Mundial que dará vida al gobierno de la bestia,
“Y me llevó en el Espíritu al desierto; y vi a una mujer sentada sobre una bestia escarlata llena de nombres de blasfemia, que tenía siete cabezas y diez cuernos.” (Apocalipsis 17:3)
“Después vi otra bestia que subía de la tierra; y tenía dos cuernos semejantes a los de un cordero, pero hablaba como dragón. Y ejerce toda la autoridad de la primera bestia en presencia de ella, y hace que la tierra y los moradores de ella adoren a la primera bestia, cuya herida mortal fue sanada.” (Apocalipsis 13:11,12)
En el capítulo 12 de Apocalipsis podemos verlos representados en la figura del dragón escarlata, identificándolo como el autor intelectual del plan,
“También apareció otra señal en el cielo: he aquí un gran dragón escarlata, que tenía siete cabezas y diez cuernos, y en sus cabezas siete diademas; y su cola arrastraba la tercera parte de las estrellas del cielo, y las arrojó sobre la tierra.” (Apocalipsis 12:3,4)
La revelación profética nos dice que cuando el anticristo surja al poder, derribará a tres reyes o bloques comerciales,
“Y los diez cuernos significan que de aquel reino se levantarán diez reyes; y tras ellos se levantará otro, el cual será diferente de los primeros, y a tres reyes derribará.” (Daniel 7:24)
En el hemisferio occidental se encuentran tres bloques importantes: USMCA (comprende a Canadá, Estados Unidos y México), CARICOM (abarca países de Caribe y algunos del norte de Sudamérica) y MERCOSUR (reúne la mayor parte de los países de Suramérica). Cada uno de estos bloques es representado como un cuerno en el gobierno globalizado del anticristo. Tendrán sus respectivos portavoces que los representarán ante la comunidad internacional.
Las escrituras proféticas parecen indicar que en esta parte del mundo se presentará la mayor resistencia hacia la instauración del gobierno de la bestia. Por tal razón, el anticristo los considerará un gran obstáculo para su gobierno y arremeterá para destruirlos. Muchos intérpretes opinan que pudiera ser por un ataque nuclear, pero eso no sería visto con buenos ojos ante las demás naciones que estarán buscando la unidad y la paz. Sin embargo, hay una manera más disimulada de destruirlos y dar la apariencia de un desastre natural. Esto sería mediante la activación de armas ambientales, capaces de cambiar el clima y provocar desastres en ciertas regiones. El único lugar donde se pudiera originar un cataclismo que produzca la destrucción de los países de esta región y sacarlos del ambiente internacional sería el supervolcán de Yellowstone. Se provocaría la erupción de este fenómeno y su efecto sería catastrófico para todo el continente, desde Canadá al norte hasta Argentina en el sur. Las múltiples fallas tectónicas en el área serían desprendidas y tendrían lugar terremotos descomunales que harían desaparecer las islas. Las dos Américas quedarían sumidas bajo polvo volcánico y el efecto invernadero por años,
“Miré cuando abrió el sexto sello, y he aquí hubo un gran terremoto; y el sol se puso negro como tela de cilicio, y la luna se volvió toda como sangre; y las estrellas del cielo cayeron sobre la tierra, como la higuera deja caer sus higos cuando es sacudida por un fuerte viento. Y el cielo se desvaneció como un pergamino que se enrolla; y todo monte y toda isla se removió de su lugar.” (Apocalipsis 6:12-14)
Existen varias razones por la que podemos llegar a esta conclusión:
1. No hay evidencia bíblica de que Estados Unidos y los demás países del hemisferio occidental participen en el desarrollo de los eventos del fin.
2. Estados Unidos se opone a la globalización y mucho mas si ellos no tienen el control del sistema. Son la potencia militar más poderosa del mundo y ceder su hegemonía e integrarse para compartir su poder con otros países es difícil que suceda.
3. Los países del hemisferio occidental han oído mucho acerca de las profecías del fin y a pesar de toda la maldad que existe en sus países, son de tendencia conservadora y se hará muy difícil un cambio hacia un gobierno abiertamente enemigo de Dios, como será el del anticristo.
Recordemos que estos eventos ocurrirán después de arrebatada la Iglesia del Señor; no nos toca pasar por ese período de juicio,
“Porque no nos ha puesto Dios para ira, sino para alcanzar salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo, quien murió por nosotros para que ya sea que velemos, o que durmamos, vivamos juntamente con él.” (1 Tesalonicenses 5:9,10)
Todavía estás a tiempo de ser parte del pueblo que se levanta, entrega tu vida a Jesús hoy, no esperes más; sabemos de hoy, pero no de mañana. Él ha prometido librarte de ese período tan terrible que se avecina,
“Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te guardaré de la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que moran sobre la tierra. He aquí, yo vengo pronto; retén lo que tienes, para que ninguno tome tu corona.” (Apocalipsis 3:10,11)
CONTINUARÁ …